LUCIFER Y MIGUEL, ARCÁNGELES GEMELOS.

NUNCA HUBO UN ARCANGEL CAÍDO.

Creacion=Dios=  Universo primigenio mental=No físico.

Unidad=mismo pensamiento.

Árcangeles y ángeles=Seres de luz.

El Arcángel Miguel Príncipe de la Luz, y Lucifer Príncipe de las Tinieblas, envueltos en una batalla por toda la eternidad sobre el destino de la humanidad o eso es lo que quiere hacer creer la Iglesia.

Es tal vez la historia más reordenada y malinterpretada de todas, permítanme explicar una versión muy real de los acontecimientos.

Dios y los ángeles estaban juntos en la Unidad, todo estaba todavía unido como Uno, la Creación existía, pero la experiencia individual (física) de la Creación aún no era posible.  

La Creación (universo mental) quería experimentarse a sí misma siendo Creativa y así se formó un Plan Divino. 

Algunos de los Árcangeles y ángeles entrarían en un estado donde pretenderían estar fuera de la Unidad para poder participar en los aspectos únicos de la Unidad. (Ser físicos)

El que ustedes conocen como Lucifer (no confundir con (Satanás (satana-el, Luzb-el o Belc-bu))) fue el primero en ofrecerse para "dejar" el Cielo, mientras que el Arcángel Miguel fue el jefe de los ángeles que se quedaron, aquí nunca hubo conflicto, sino que todos trabajan juntos hacia el mismo Objetivo, cumplir el plan de "Dios"

La verdadera historia de lo que ocurrió después es la del hijo pródigo lucifer, no la de una guerra entre "el bien y el mal". Lucifer, literalmente el "portador de la luz", fue el hijo que dejó su Casa (el Cielo, universo mental) para compartir su herencia (fiscalidad) con toda la Creación. Miguel, literalmente "el que es como Dios", fue el hijo que se quedó en su Casa. Nótese cómo la gente juzgó al hijo que se fue por "gastar" toda su Herencia, mientras que el Padre se alegraba de eso (esa era la idea original, experimentar). Lucifer estaba destinado a divertirse en la Creación fisica, no a ser tacaño con las bendiciones que se le dieron.

Cuando el hijo pródigo regresó, el Padre le dio también la Herencia del otro hijo (Miguel). 

¿Qué sentido tendría dejársela a Miguel si no va a hacer nada con ella? No es que a Miguel le importara en absoluto, él ya era la Creación. Miguel es la Creación, Lucifer es la experiencia de la Creación. 

Por supuesto, si estás aquí experimentando la Creación, ¿cómo puedes estar fuera de la Creación? No puedes, así que eres la Creación experimentándose a sí misma y por lo tanto Lucifer es Miguel y Miguel es Lucifer. Dos aspectos (lados)de la misma Unidad (moneda,). Y ambos no están separado de esto, lo que significa que ambos aspectos están dentro de ti también.

Hablando de lucifer, ¿cómo llego a estar aquí, en los llamados "reinos inferiores"?

Todos los seres nacimos de la Unidad, así que ¿cómo llegó la Humanidad a estar separada de Dios? Simple, cada Alma en este reino es una que eligió unirse a Lucifer, un ángel "caído" pero que nunca fue caído, solo tomo la opción que le dió la creación (Dios) de experimentar la vida. 

Hay un poco de verdad en la historia, pero no es un ser "equivocado", "malo" o "malvado", sino uno muy valiente y aventurero, no uno que se rebeló contra Dios, sino uno que se desconectó de Dios en su interior para vivir la maravillosa experiencia de la fisicalidad.

Y no fue Lucifer el causante de que las personas estuvieran tan empantanadas dentro de sus ilusiones. 

Cuando Lucifer "dejó" el Cielo, todavía existía la comprensión de que uno seguía siendo siempre uno con el Cielo, y que simplemente estaban soñando.

Este Jardín del Edén de la leyenda solo fue posible hasta que la Humanidad perdió la Llama Violeta y no pudo limpiar  las energías de baja vibración así que las cosas empezaron a estropearse realmente. 

Entonces los ángeles se olvidaron de que eran ángeles y empezaron a hacer cosas como trabajar y unirse a ideas propias de lo fisico.

Ahora, lo que estamos diciendo es que forman parte de lo que les han dicho (inculcado las iglesias) que es el más malo de los males. Estas creencias están tan extendidas que casi todo el mundo ha sido condicionado por ellas. El infierno, Lucifer y los ángeles caídos, tienen muchos otros nombres en diferentes culturas. Seguro que la gente no quiere oír que son (ustedes) los ángeles "caídos", ¿en qué se convertiría el mundo en el que viven? El mundo (vivencias) en el que está la mayoría de la gente es el infierno, aunque el planeta en el que viven es el Jardín del Edén, una nave estelar viviente.

Superpusieron sus ilusiones a la Verdad y se perdieron la Realidad por completo, pero siguen siendo los hijos e hijas pródigos y la puerta del Hogar siempre está abierta. 

Este ha sido siempre el mensaje de Lucifer, el Portador de la Luz.

El conflicto ilusorio entre Miguel y Lucifer se ha proyectado en la vida cotidiana de la gente. No hay y nunca hubo, una guerra que dividiera al Cielo contra sí mismo. Es una metáfora del propio conflicto interno de la gente. Los ángeles vinieron al manifiesto (vida física) para disfrutarla, pero la religión nos enseña que este reino está gobernado por el mal y que el objetivo de que estemos aquí es escapar al cielo. 

Esto crea una ilusión dualista de dos caminos, uno de los "malvados", que se entregan a los placeres físicos, y otro de los "justos", que reniegan de los placeres físicos creyendo que obtendrán alguna recompensa en el Cielo. Estos dos supuestos caminos espirituales sólo conducen en círculos, Buda compartió esto hace más de 2.000 años, pero la gente todavía no lo entiende. No hay dos caminos, sólo existe el camino que estás recorriendo, y cuando aprendas a disfrutarlo no necesitarás esperar alguna recompensa en el Cielo, habrás traído el Cielo aquí a la Tierra a través de tu propia alegría. Dividir a Lucifer y a Miguel crea un conflicto en el interior.

La maldad real viene de reinos dimensionales de muy bajo astral, esos si existen y traspasan esos umbrales para presentarse en este universo dimensional.

Estos hechos plasmados aquí vienen de archivos secretos vaticanos "secretum Omega" para quitar el velo que pretende la iglesia poner para mantener su argumento y  control hacía el rebaño eclesiástico, ya que de lo contrario se exhibirian millones de años de desarrollo de todas las civilizaciones de entes de luz.